martes, 4 de diciembre de 2012

LA INUTILIDAD APRENDIDA

Nota aclaratoria: Este no es un post muy de mi estilo, pero a ver, lo escribo por mi salud mental ¡¡necesito desahogarme!!


Hace ya muchos años que escuche por primera vez este término. Lo oí en boca de una compañera y amiga psicóloga y al pronto no supe ver a  que se refería ...

¿Inutilidad aprendida?

Parece una contradicción. Luego al explicármelo, lo ví claro como el agua. Y podía reconocer ese comportamiento en muchos de los niños con discapacidad con lo que trabajaba en aquel entonces.
No es un término aplicable solo a la discapacidad ni muchísimo menos.

Yo por aquel entonces aún no era madre, y ahora tantos años después, que lo soy por triplicado me doy cuenta de cuán a menudo, estoy inculcando en mis hijos esta Inutilidad aprendida.

¿¿En qué consiste?? Pues básicamente os lo resumiré diciendo que en muchas de mis actuaciones diarias mis hijos están aprendiendo a ser unos inútiles. Tal cual. Se podría matizar, claro está, pero esa es la esencia.

En cantidad de ocasiones no dejamos que nuestros hijos desarrollen sus potenciales capacidades e intentamos “facilitarles” la vida inhibiendo no sólo su aprendizaje sino su voluntad de adquirir nuevas habilidades.

¿Causas? Muchas.

Algunas veces miedo. Miedo a que fracasen y lo pasen mal.
Otras veces: falta de tiempo.
O sobreprotección. El  típico: “pobrecito"
Muchas veces las tres cosas juntas.

Evidentemente si yo espero cada mañana a que Mario se quite solo el pijama y se intente poner prendas de vestir, me dan las uvas. Solución: ya lo visto yo que acabamos antes. En realidad SÉ que debería levantarlo 15 minutos antes cada mañana
“Pobrecito”, piensa una…no le voy a quitar 15 minutos de sueño… Tal vez solo me haga falta quitárselos los primeros días, tal vez puedo acostarlo un poco antes, el hecho es que es mucho más cómodo vestirlo yo y evitarme un berrinche mañana sí y otra también (eso sin tener en cuenta la que me caería por parte de las abuelas: "es mu chico", …etc, y una es débil…. No soporto bien a estas alturas el acoso y derribo abuelil)

No penséis que me pasa sólo con el peque. ¡ojo! Lo hago igual de a menudo con los dos mayores.

¿¿Qué no encuentras la palabra en el diccionario?? Trae que te la busco, leche, que no tenemos toda la tarde…

¿¿qué no se te ocurre un ejemplo de frase con la palabra lingüista?? A ver copia….

“Mamaaaaá no me has puesto calcetines”  Espera que ya te los saco
(qué cojones ¡¡que sabe perfectamente dónde están!! Si no le pegan con el jersey no creo que nadie sufra un colapso en el cole porque el niño no sea un gurú de la moda)

“Mama que se me han olvidado los deberes” …. Espera que llamamos a Fulanito y nos los dicta. O nos hace una fotocopia. O nos los escanea y manda por mail (juro que yo he hecho esto último en más de una ocasión para algunos compañeros de mis hijos)

(Oye  y si  les cae un castigo porque se le han olvidado ¿qué mejor forma de que no vuelva a sucederle??)

Yo, señoras y señores, caigo en todo esto. Y que conste que las abuelas siguen considerándome una madre estricta.
Pero coño, es que una está a veces cansada, o no tiene ganas de discutir ¡¡que vuelen los burros por un día!!, o piensa que estás haciéndole un bien…

¿Pero sabéis cuál es el verdadero problema de este “síndrome” de inutilidad aprendida?
El verdadero problema no es que no aprendan, o que no sean capaces de hacer algo por sí solos. Lo verdaderamente malo es … ES QUE PIENSAN QUE NO SON CAPACES DE HACER LAS COSAS.

Ellos ¿qué pueden llegar a percibir? Mi madre me lo hace porque no cree que yo pueda hacerlo sólo.
Y acaban siempre trabajando por debajo de sus posibilidades.
Os parecerá quizás una tontería pero es así.
Y lo sé porque Eduardo me lo ha dicho así.

Eduardo sabe atarse los cordones…pero me lo pide cada día!! "Si, me los pones tú mamá, que yo no lo hago bien"¿¿?? ¡¡Claro que lo hace bien!! Pero si sigo haciéndolo yo, se le olvida seguro

Y el otro día me quedé de piedra porque Alejandro se fue sin abrigo al cole y cuándo su padre le dijo que por qué no se lo había llevado , que con el frío que hacía estaba cayendo la muerte pelá, va y le contesta "Es qué mama no me ha dicho que lo cogiera" O_O Tampoco le digo por las mañanas que se ponga calzoncillos y se los pone!!! (hasta ahora claro,...a saber como acaba esto)

Y hay un problema más, la causa por la que hago hoy esta reflexión.
Porque estoy saturada. Ya no puedo más.
Y es cierto que tengo muchas responsabilidades diarias, pero también es cierto que me echo otras muchas que no me corresponden,

Yo no puedo o no quiero hacer más trabajos sobre la Constitución Española,  no puedo  y no quiero revisar sus mochilas, no puedo dejarles preparado hasta el  pañuelo de los mocos para que se vistan por la mañana, me niego a seguir haciendo de ellos unos inútiles, más que nada porque van a requerir de todas esas habilidades de aquí a poco porque a este ritmo acaban conmigo.

Así que hijos míos, aquí  pongo por testigos de que a partir de hoy:

- Los deberes escolares son cosa vuestra, que sois los que estais escolarizados …yo dejé el cole hace 20 años… Y no pienso coartar vuetrsa libertad a la hora de responder cuestiones académicas (aún a sabiendas de lo peligroso que es dejar volar la creatividad de Eduardo en sus respuestas). Es lo que hay. Que corrija el profe.

- No reviso ni una mochila más. Si se te olvida un libro o cuaderno, o flauta, o lápices, o trabajo, o merienda, o circular o examen firmado (sí, no son ejemplos al azar, sieeempre hay alguno que se olvida algo de lo mencionado) APECHUGA

-      Sabéis dónde están las pajitas, y las cucharas, y los calzoncillos, y los calcetines, Y si no lo sabéis (cosa que dudo) os pongo etiquetas en los cajones. Los dos pies que tenéis no son sólo para jugar al fútbol.


A cambio os prometo que intentaré daros la confianza necesaria para hacerlo solos y recordaros  a menudo cuánto valéis y lo segura que estoy de que tendréis éxito en lo que os propongáis. (Intercalado con algún que otro grito y MeCagoEnToLoQueSeMenea, seamos realistas)


Eso para empezar...y ya se me irán ocurriendo, pero más vale empezar poco a poco no se me vayan a rebelar.

Y además que me da en el hocico que me va a costar a mí, más que a ellos...